
Cuando desde el Tercer Sector hablamos de integrar, lo habitual es pensar en temas como la migración y el respeto a otras culturas. Esto es así, por supuesto, pero hay muchas formas diferentes de integración.
Porque integrar no siempre es al extranjero, a veces la integración hay que trabajarla con personas de tu propia sociedad natal. Personas que son diferentes. Personas con otras capacidades que muchas veces se ven relegadas por no ajustarse a una norma.