El arte nace para ser compartido. Compartir está en la esencia de valores como la integración, la empatía, el respeto… es una acción, un verbo, que debería ser fundamental en el desarrollo humano. De hecho, a los niños pequeños es una de las palabras que más se le repite: “debes compartir”.
Sin embargo, muchas veces olvidamos esa palabra cuando crecemos.
Por eso hay que seguir no sólo enseñándola, si no, viviéndola.
Eso es lo que ha hecho nuestra artista de danza Mercedes Prieto en el CPI Antonio Failde de Galicia con motivo del cierre de trimestre escolar en el que ella misma nos resume todo lo que han trabajado desde la metodología MUS-E y lo que han compartido tanto con las familias como con una residencia de mayores de la zona:
“En este trimestre hemos trabajado la creatividad buscando otras utilidades para objetos como un pañuelo que generalmente se usaba por las mujeres en Galicia para protegerse del sol y del frio, curiosamente el origen de ese tipo de pañuelos es de Rusia.
También hemos trabajado una coreografía de Navidad con el grupo de quinto para poder regalársela a los mayores de una residencia próxima al centro dentro del programa solidario.
Con el grupo de los más pequeños nos hemos presentado y hemos empezado a explorar el espacio con diferentes acciones motrices, lo cual nos ha gustado mucho y nos hace sentir bien trabajando juntos.
Pero lo especialmente bonito ha sido poder contar con algunas familias que han participado en las sesiones de los más pequeños compartiendo la felicidad de estar juntos bailando y conociéndonos un poco mejor pues no hay nada que nos una más que los afectos.
Los objetivos MUS-E en este trimestre han sido revistos con cada grupo y hemos reflexionado sobre los puntos más conseguidos y los que todavía están por desarrollar y profundizar.
Hemos abordado el tema de la cohesión y los conflictos con los mayores, donde su maduración permite abordar ampliamente estos temas.
Con los de 1º hemos empezado, claro realizado actividades de presentación del programa y de la artista.
La competencia más trabajada en las sesiones de danza son sin duda las sociales y culturales.
Han demostrado siempre sentido de iniciativa con las actividades relacionadas con la creatividad y transformación”
