Lavinia Vila, artista MUS-E de la Fundación Yehudi Menuhin España, ha tenido en el CEIP Antonio Machado (Fuenlabrada) uno de los puntos sobre los que ha girado su labor este curso. A modo de retrospectiva, como ya ha sucedido en otras ocasiones, nos hace un somero análisis de cómo ha sido la labor MUS-E en el curso 2018-2019. El Programa se desarrolla en el CEIP Antonio Machado mediante la FYME y con la colaboración de las Consejerías de Educación y de Servicios Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid.
«En general los grupos se han mostrado muy motivados y participativos. Se ha trabajado mucho con la escucha, el conocimiento de la energía grupal y el control de esa energía para poder realizar la dinámica, canalizándola hacia la creatividad. En este sentido se han conectado a nivel general y a medida que pasaba la sesión estaban cada vez más cohesionados y con más capacidad de escucha. El nivel de expresividad, creatividad y desinhibición así como el ritmo de trabajo se puede ir mejorando teniendo más sesiones, ya que han necesitado un ritmo pausado para ir entrando en las dinámicas e irse desinhibiendo y entendiendo el juego teatral que se les estaba proponiendo. Son grupos con una motivación alta y capaces de reorganizarse y reconducirse cuando el nivel de escucha y atención grupal no es el adecuado para poder crear todos juntos, pero es cierto que necesitan tiempo, pausas para reflexionar y respirar y más sesiones para ir abriéndose.
«El centro se ha mostrado muy colaborador con el Programa, intentando cubrir las necesidades y hacer un seguimiento para que las sesiones tengan su máximo desarrollo posible. Los grupos-clase también se han mostrado muy interesados en el Programa así que como propuesta de mejora habría principalmente la necesidad de tener más sesiones y poder trabajar a nivel profundo con cada grupo- clase.
«Decir que el Programa ha tenido pero muy buen recibimiento por parte del alumnado, que se ha mostrado participativo en las dinámicas. Al inicio en general ha sido necesario realizar dinámicas de escucha y atención grupal ya que los grupos mostraban dificultades en la escucha, pero la evolución ha sido favorable y han terminado en general muy implicados en las dinámicas propuestas.
«Se ha hecho un trabajo muy enfocado a nivel grupal en este sentido, creando dinámicas de escucha activa entre el grupo, donde fuera importante la aportación de cada persona en un momento dado para crear una obra conjunta. Se mostraron abiertos y participativos, con una actitud comprometida con el trabajo y conectados con el grupo, la evolución por tanto ha sido favorable».