Daniel Barenboim (Argentina, 1942) premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 2002 a propuesta de la Fundación Yehudi Menuhin España (FYME) ha publicado una tribuna en el diario El País donde coincide con los planteamientos del maestro Menuhin quien afirmaba:
“No puede haber un arte auténtico que esté conforme con el hambre, las bombas y la tortura… Cada ser humano tiene la eterna obligación de convertir aquello que es duro y brutal en ternura y delicada entrega, lo tosco en objeto de refinamiento, lo repugnante en objeto de belleza, confrontación en colaboración, ignorancia en conocimiento, y así, redimir el sueño de los niños, en una realidad creativa renovada incesantemente por la muerte, servidora de la vida, y por la vida, servidora del amor.”
Entre las reflexiones que hace en su texto, que os invitamos a leer en su totalidad, destacamos:
Nos rendimos ante esta terrible violencia y dejamos “morir” nuestra búsqueda de la paz, o seguimos insistiendo en que debe y puede haber paz?
Nuestro mensaje de paz debe ser más fuerte que nunca. El mayor peligro es que todas las personas que tan ardientemente desean la paz se vean ahogadas por los extremistas y la violencia.
La voluntad de empatizar, la disposición a empatizar con la situación de los demás es esencial. Por supuesto, y especialmente ahora, también hay que dar cabida a los miedos, la desesperación y la ira, pero en el momento en que esto nos lleve a negar la humanidad de los demás, estaremos perdidos.