El arte no es sólo una expresión de creatividad. Es una forma de entender el mundo. Pero no sólo el mundo ajeno a nosotros, si no el entorno más cercano.
Ana Hernández, artista plástica de la Fundación Yehudi Menuhin España, ha desarrollado un trabajo muy necesario con los alumn@s del CEIP Gabriel y Galán de Cáceres.
Una vez explicada la técnica del frottage con carboncillo y como se hace, distribuimos el material a los alumnos y a partir de aquí cada alumno tiene total libertad en buscar y experimentar para conseguir estampar y crear con el carboncillo en el folio una sensación de textura.
Un trabajo que no sólo despierta la vena artística en los menores, si no que les permite ver, conocer, tocar y descubrir de otra forma el espacio del colegio a través de estas “texturas visuales”.
Los niños y niñas disfrutan mucho del re-descubrimiento de rincones a los que están habituados pues tienen que educar la mirada para descubrir una nueva forma de “ver” y poder plasmar las texturas que muchas veces nos pasan desapercibidas al ser corrientes en nuestro día a día.
Así, a través del arte, aprendemos a desarrollar una mirada diferente, a afrontar los retos de otra forma y entender que no todo el mundo ve el mundo de la misma manera. Y esa es la base del respeto, entender las miradas diferentes.
Esa es la metodología MUS-E en la que se basa el programa, en educar en valores mediante el uso del arte.
El Programa es posible a través de la FYME y en virtud del acuerdo con la Consejería de Educación y de Empleo de la Junta de Extremadura, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales , además del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de su convocatoria del 0,7% también han colaborado en estos trabajos.