Hoy compartimos el informe del trabajo realizado, siguiendo nuestra metodología MUS-E, por la artista de yoga, Inma Gaitán, en el CEIP Real de Melilla e las sesiones de este curso 2021-22 que concluye:
“Los niños y niñas entre cinco y seis años son extremadamente energéticos y tienen dificultad en quedarse inactivos.
Casi todas las propuestas, en las sesiones de yoga, implican movimiento y a la vez como ya son más capaces de resolver problemas abstractos, pueden participar activamente imaginando, proponiendo situaciones o soluciones a conflictos que se puedan presentar reales o imaginados
Les gusta hablar de historias o contar las suyas propias. Les cuesta esperar su turno de palabra y es algo que trabajamos, para que aprendan a escuchar y a mantener la atención cuando otros u otros hablan.
Es importante darles este espacio para que se expresen y puedan contar cómo se sienten.
Tienen conciencia de los demás en el espacio y de la habitación donde se mueven.”
También os dejamos algunas fotos de las sesiones así como las explicaciones de las mismas que la artista reseña:
Espalda con espalda
Hacer yoga en pareja es muy divertido y tiene múltiples beneficios. Reduce el estrés porque aunque son pequeños, se ven expuestos continuamente a las exigencias y muchas veces el agobio que les supone las diferentes tareas, portarse bien, atender y estudiar.
La clase de yoga está enfocada en que puedan liberar esta tensión, hablar de las cosas que les preocupan y en general establecer un espacio de confianza. Sentir que somos un equipo y que podemos contar con todos y todas.
Estar espalda con espalda y balancearse, es muy relajante, favorece la flexibilidad, la coordinación, la escucha atenta de la necesidad de la persona que tenemos a nuestra espalda
Es un trabajo que les supone una auténtica inyección de energía y bienestar.
Posturas en Pareja con soporte de un aro
En yoga fomentamos el trabajo en pareja para potenciar la confianza y el apoyo que en un momento dado, puede darte la persona que tienes a tu lado.
Como a veces les cuesta mucho el contacto físico especialmente, chico con chica, el aro les ayuda a crear un acercamiento, donde van construyendo la seguridad y la confianza.
La primera parte del ejercicio es construir la base de la confianza con diferentes propuestas para que se sientan más seguros y puedan confiar en el apoyo mutuo que se dan.
La segunda parte es quitar el aro y hacer ejercicios parecidos. El agarrarse de las manos surge de manera natural.
Es importante desde temprana edad que interioricen que a veces para que las cosas nos salgan mejor necesitamos apoyo del entorno.
Este tipo de dinámica donde hacemos posturas de yoga con apoyo de aro o de manos, les ayuda a empatizar y tener en cuenta a la otra persona.
Sabemos por la neurociencia que tomarse de las manos sincroniza los corazones y ayuda en momentos donde nos sentimos tristes o con dolor.
Los ojos forman parte del cerebro.
Sabemos por la neurociencia que cuando fijamos la mirada de manera suave prestando atención, es decir dirigir la mirada a un lugar, punto concreto, un objeto o a nuestra respiración, la red por defecto que tiene mucha actividad cerebral, se calma.
Fijar la mirada mientras respiramos conscientemente activa los mecanismos de la atención y trabaja áreas del cerebro que tienen que ver con la memoria, la gestión de las emociones, resolución de conflictos entre otras.
Cuando fijamos la mirada hay una comunicación con el cerebro más estable y esto ayuda a que estemos más en calma y no seamos tan reactivos.
Encima de los ojos tenemos la corteza orbitofrontal que es la zona del cerebro que tiene que ver con el bienestar, la alegría, empatía y generosidad.
Con este ejercicio estimulamos toda esta zona y después nos sentimos mucho mejor.
En este ejercicio hemos colocado un objeto en el centro para fijar la atención mientras mantenemos el equilibrio. Fomentamos el vínculo de equipo y sabemos que si perdemos el equilibrio te puedes apoyar en tu compañera o en tu compañero.
Los beneficios de las posturas de equilibrio son numerosos:
Ayudan a corregir nuestra postura corporal, mejora el equilibrio emocional, regula el sistema nervioso, mejora nuestra concentración y fortalecimiento de piernas y brazos entre otras.
El Programa en Melilla es posible a través de la FYME y gracias al acuerdo suscrito con Ministerio de Educación y de Formación Profesional. Además han participado y colaborado también la Consejería de Bienestar Social de la Ciudad Autónoma de Melilla y el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de su convocatoria del 0,7%.