El ser humano es un animal social y, por lo tanto, necesita comunicarse con el resto. Una cuestión que parece sencilla, pero que, en el mundo actual, se dificulta para personas con diversidad funcional, especialmente vocal o auditiva.
Sin embargo, la diversidad aquí juega u papel fundamental, pues el ser humano no se comunica exclusivamente con su voz y sus oídos. El cuerpo, el lenguaje no verbal, es también una herramienta de lenguaje que tenemos casi olvidada y que muy poca gente estudia. Pero de ahí surgió el lenguaje de signos que emplean las personas sordomudas y que les permite comunicarse.
Por eso los alumnos y alumnas de 6º de Primaria del CEIP Nuestra Señora del Remolino de Madrid eligieron este lenguaje, entre otras cuestiones, para crear su vídeo en el que comunicar su mensaje. Un ejemplo de integración, respeto a los demás y fomento de la diversidad.
El resultado son unos vídeos que nos comenta la artista MUS-E de teatro del centro, Alba Palacios:
“El grupo de los mayores del colegio para su despedida de último curso se ha centrado en la identidad y el respeto a la diferencia. Con herramientas del lenguaje de signos, la expresión corporal y el arte urbano han reflejado sus características como grupo y lo han plasmado en una coreografía. En esta expresan sus inquietudes ante temáticas que les preocupan a nivel social (bullying, salud mental, violencia, etc) y sus fortalezas para combatirlas y transformarlas”
6ºA:
6ºB:
El programa es posible gracias a la cofinanciación de la Unión Europea y la colaboración del Ministerio de Educación y Formación Profesional, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, la Consejería de Educación, Universidades, Ciencia y Portavocía de la Comunidad de Madrid, la Consejería de Políticas Sociales, Familia, Igualdad y Natalidad de la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de su convocatoria de Subvenciones 0,7%