El programa IntegrArte se centra en trabajar la educación en el ámbito educativo como espacio de normalización de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes de origen inmigrante, segundas generaciones y autóctonos para crear un efecto multiplicador en el marco de una ciudadanía activa. IntegrArte busca obtener una nueva dimensión de inclusión para las personas en el ámbito educacional y escolar.
IntegrArte está fomentando la participación directa de las personas en la sociedad democrática, proporcionándoles las herramientas, estrategias y redes de apoyo necesarias para garantizar su empoderamiento. Es decir, se trata de ayudarles a ser autónomos y capaces de luchar contra cualquier forma de discriminación, incluyendo los procesos xenófobos y racistas en los que puedan verse involucrados.
Pero no se trata solo de proporcionar información teórica sobre los derechos y obligaciones de las personas. Es necesario que las personas sientan e interioricen estos conceptos para que puedan luchar contra los estereotipos y prejuicios que muchas veces influyen en las actitudes discriminatorias. Además, es fundamental trabajar con las segundas generaciones, que a veces heredan esta mirada discriminatoria por su origen familiar o color de piel, aunque ya sean ciudadanos europeos.
Es en este contexto que la metodología MUSE, que utiliza el arte para inculcar valores, se ha mostrado muy eficaz. El espacio educativo es sin duda un lugar idóneo para trabajar la cohesión social y la diversidad cultural y religiosa, y para cambiar actitudes xenófobas y racistas. El mestizaje de culturas que ha sido la construcción de Europa es una oportunidad única para establecer puentes y vínculos culturales e históricos entre personas de distintas procedencias.
La discriminación y el racismo siguen siendo una realidad en muchos ámbitos de nuestra sociedad. Es por eso que la metodología MUS-E seguirá trabajando en este ámbito, fomentando la participación activa de las personas y proporcionando las herramientas necesarias para luchar contra la discriminación. Solo así podremos construir una sociedad más justa e inclusiva para todas las personas, independientemente de su origen o situación administrativa.