El yoga supone un conocimiento del propio cuerpo y del de los demás para trabajar el equilibrio y la armonía. A través de él se pueden trabajar diferentes valores como nos ha demostrado nuestra artista de esta disciplina, Maribel Landeira, en el CEIP Anselmo Pardo de Melilla.

Ha trabajado con alumnos de diferentes edades. 

Foto de los alumnos de 4 años

En esta ocasión los niños y niñas de 4 años han practicado las posturas de yoga en ćírculo como el árbol. Esta dinámica les ayuda a estrechar vínculos, trabajar la confianza en uno m ismo y en los demás, a favorecer el contacto respetuoso y desarrollar las habilidades y destrezas motrices como la coordinación y el equilibrio.

Posturas retadoras para Alumnos de 5° como el equilibrio del cuervo, que desarrolla la fuerza física y mental, ya que el yoga actúa en ambos planos, además del emocional y espiritual cuando se cultiva el estado de calma y se trabaja la autoescucha.

Además, en cada grupo han trabajado aspectos diferentes, siempre desde la metodología MUS-E, tal y como nos comenta la propia Maribel:

“Con los más pequeños se han trabajado las competencias a través del juego. Las técnicas de respiración, el viaje a otros lugares representándolos con posturas de yoga, canciones para recordar como sentarse con la espalda recta, yoga en parejas para que se relacionen entre ellos y ellas de una forma divertida. Asimismo se han realizado equilibrios de yoga en grupo para que vieran que con la ayuda de todos se podía mejor. 

Hemos aprovechado que había niñas que tenían familiares con procedencia de otros países para aprender a saludarnos en otros idiomas. Aparte de Namaste de la India (mi alma saluda a tu alma), Konnichiwa en japonés (abreviatura de ¿cómo te encuentras?) o Salam en árabe (que literalmente significa paz) y cuando llegaba a la clase a todos y a todas les encantaba saludar con los tres.

En 4º hemos podido trabajar las competencias a través de las distintas actividades que se han desarrollado según lo previsto y la valoración es positiva puesto que han mostrado mucho interés en ellas y los menores han participado activamente en los juegos de yoga, tanto de forma individual como en equipo, técnicas de respiración y de atención a los sentidos y las emociones, así como la observación de cómo estas se muestran y sienten en el cuerpo físico. 

Con 2º me he centrado en las emociones y el trabajo grupal y se ha logrado un trabajo muy bonito donde los niños y niñas han mejorado la habilidad de observar y expresar lo que sienten.”

El Programa en Melilla es posible a través de la FYME y gracias al acuerdo suscrito con el Ministerio de Educación y de Formación Profesional. Además han participado y colaborado también la Consejería de Bienestar Social de la Ciudad Autónoma de Melilla y el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 a través de su convocatoria del 0,7%.