El artista MUS-E de la Comunidad de Madrid Javier Fadón pone de relieve la importancia que en este curso 2020-2021 tiene la presencia del MUS-E y del Programa Integr-Arte en el centro educativo de la Comunidad de Madrid. Analizamos con él cómo ha sido su labor.
«Este año más que nunca era muy necesario que los chicos tuvieran el Programa Integr-Arte
-MUS-E pues está siendo un año muy difícil para ellos por la COVID19, por lo que se ha hecho un esfuerzo muy grande por parte de los colegios y laFYME para que se pueda impartir las sesiones adaptándonos a los protocolos de seguridad. Y por ser sensibles a esta realidad, dos de los objetivos en los que se iba a hacer más hincapié fueron ‘Trabajar la inteligencia emocional y su puesta en práctica tras la COVID19 para favorecer la socialización y la normalización’ y ‘Ayudar a gestionar las emociones, dotar de recursos antes las frustraciones, mejorar la atención y la escucha’.
»Mediante el trabajo de improvisaciones sobre temas y conflictos cercanos a su realidad se ha alcanzado un alto grado pues su implicación en estos trabajos ha sido máxima. También funcionaba muy bien el doble rol desempeñado de actor, cuando les tocaba representarlo/ espectador, cuando observaban el trabajo de los compañeros con escucha, interés y respeto. Y la posterior puesta en común de lo sentido y vivido.
»Se ha puesto mucho valor en entender (la Danza, la Música, las Artes Plásticas, el Teatro), como otro lenguaje por medio del cual podemos comunicarnos, conocernos, aprender valores, reconocer emociones, posibilidades de movimiento y que el disfrute sea muy alto. Sólo hay que ver cómo ya van adquiriendo ciertos códigos de estos lenguajes, cómo les motiva, cómo han ido mejorando por ejemplo en la expresión corporal o cómo son menos reacios a implicarse en el trabajo de emociones.
»El hecho de desarrollar trabajos de creación personal a nivel individual, ya fueran corporales, de composición, de improvisación, etc., mostrándoselo a los compañeros y viendo cómo estos los recibían y los valoraban, hizo que la autoestima se reforzara, y prueba de ello era que chicos que en las primeras sesiones eran tímidos o no confiaban en ellos mismos y les costaba soltarse en estos trabajos individuales. Luego, en las sesiones finales ya se les veía más sueltos, disfrutando y dando rienda suelta a su creatividad liberándola del yugo del juicio crítico o de la aceptación de los demás.
»Partimos de grupos muy activos y con capacidad de desinhibirse cuando alguna actividad lo permitía y les parecía divertida. Esto producía que al grupo le costara volver a la calma y tener escucha activa en el momento de terminar una actividad y empezar con otra y, a veces, no tenían en cuenta a los demás al realizar las actividades. Por ello, trabajamos la capacidad de desinhibición en los momentos pertinentes y el autocontrol en otros momentos durante todo el periodo MUS-E. En relación al autocontrol, en las primeras sesiones los chicos se dieron cuenta que perdían el tiempo y al estar motivados por hacer todas las actividades propuestas comenzamos a ver un desarrollo en el ritmo de trabajo en todos los grupos (la explicación de las actividades al final del periodo MUS-E era muy fluida), en procesos comunicativos y en ciertos valores sociales como el respeto y la cohesión del grupo.
»La cohesión grupal y la confianza mutua también es algo en lo que han evolucionado muy positivamente, pues al principio les costaba ponerse de acuerdo, el formar ellos los grupos, coordinarse por ellos mismos, creo que se debe a que están muy acostumbrados a que les formen los grupos y les den las directrices para ponerse a trabajar. Se ha conseguido romper esto y ya al final conseguían una organizase rápidamente. Ha influido en esto también que ha mejorado mucho la escucha y el respeto entre ellos a la hora de trabajar en grupo».
El MUS-E es posible en la Comunidad de Madrid a través de la FYME, del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social , del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, del Ministerio de Educación y Formación Profesional, además de la Consejería de Educación e Investigación y la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid